Adosada a un muro grueso que rodea el perímetro y forma la fachada a la calle, la Casa 1413 se cierra hacia el exterior y se vuelca hacia el interior de la parcela. Su planta en forma de galería continua abierta al jardín interior, propone un modo de habitar en contacto con el exterior y el aire libre.
Foto: Adrià Goula
Entorno
El muro de piedra existente que limitaba la finca recorría todo el solar y únicamente dejaba entrever las copas de los árboles del interior.
La materialidad y la irregularidad de sus geometrías le daban carácter y una presencia especial. Pero el planeamiento vigente obligaba a unas cesiones de vial que ampliaban el ancho de calle y hacían imposible conservarlo. Sin el muro existente, el primer y principal reto del proyecto es conseguir volver a contextualizar el solar, hacer una casa de nueva planta capaz de dar respuesta coherente, respetuosa y honesta con el entorno.
Foto: Adrià Goula. Plano de situación. Ver pdf
Foto: Adrià Goula
Arriba, muro existente. Debajo, muro de fachada del proyecto. Ver pdf
Proyecto
En lugar de ubicar el proyecto en el centro del jardín, se propone rodearlo. Una casa que actúe como cerca. Una casa-muro permite recuperar la continuidad urbana y permite experimentar una nueva tipología muy alargada, toda en planta baja, adaptada a la topografía y a la nueva geometría de la calle.
Planta del proyecto. Ver pdf
Foto: Adrià Goula
Sección transversal. Ver pdf
Foto: Adrià Goula
Materialidad
La casa seguirá las lógicas materiales y constructivas del muro-cerca original, pero adaptándolas a los requerimientos actuales. Se construirá integralmente con muros de carga, reutilizando piedras del muro existente y mezclándolas con áridos propios del solar junto con dosificaciones de cal y cemento. En esta base de mortero tradicional se añadirán pequeñas partículas aislantes de vidrio reciclado insuflado.
Foto: Adrià Goula
En vez de apilar, el muro se encofrará y se irá subiendo con una técnica mixta entre el tapial y el muro ciclópeo.
Secuencia de la ejecución del muro de hormigón ciclópeo. Ver pdf
Ejecución del muro: plano de rasantes y diferentes densidades de piedra de las tongadas. Ver pdf
Las capas exteriores que dan a la calle se repicarán hasta hacer aflorar la piedra, mientras que las caras interiores se dejaran con el acabado propio del muro encofrado.
Foto: Adrià Goula
A lo largo de la parcela el muro va variando su grosor y en muchos casos se hace tan grueso que permite albergar los espacios más estáticos de la vivienda, o aquellos que requieren más privacidad, tales como camas, baños, lavadero, despensa, armarios, lavamanos...
Foto: Adrià Goula
Foto: Adrià Goula
En una relación casi fractal, se van resolviendo todas las escalas del proyecto, relacionando y encadenando espacios cada vez más grandes hasta el punto de abrazar toda la parcela. Se produce una secuencia entre los espacios más domésticos y los ámbitos más exteriores y salvajes.
Alzado interior. Ver pdf
Foto: Adrià Goula
Uso
Las relaciones longitudinales se solucionan por delante del programa más estático, que queda adosado al muro, creando una larga secuencia de galerías que permitirán sacar provecho de las ganancias solares durante el período de invierno.
Foto: Adrià Goula
Detalle constructivo. Ver pdf
Cuando hace buen tiempo, las galerías se pueden abrir totalmente convirtiéndose en un gran porche abierto al jardín. Una transición entre los diferentes climas del edificio que evoluciona constantemente a lo largo del año.
Foto: Adrià Goula
Texto: memoria del proyecto por HARQUITECTES
Autoría: HArquitectes
Localización: Ullastret, Girona
Año: 2017
Colaboradores: Montse Fornés, Maya Torres
Fotografías: Adrià Goula
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Publicado: Apr 23, 2019