El tavillon, una técnica constructiva basada en las propiedades de la madera

El tavillon es un tipo de tejuela que se utiliza como revestimiento en las montañas del Jura, Alpes, Pirineos Creuse o Córcega.

La tejuela, tavaillon o tavillon (bardeau en francés) es un tipo de tablilla de madera que se utiliza tradicionalmente como revestimiento para la mejora del aislamiento térmico y la protección del desgaste de techos y fachadas. Aunque en el neolítico se utilizaba la tabla de madera como revestimiento interior de techos, esta práctica puede entenderse como un antecesor lejano del tavillon. En la Edad media el tavillon era un material de uso muy común junto con la paja, utilizándose ambos como revestimientos habituales. Con la aparición de nuevos materiales y medios de transporte mejores, se comienza a emplear materiales como la teja, pizarra o chapa metálica. Pero en las zonas más alejadas y de componente más tradicional como el Jura y la alta Saboya, esta técnica se ha mantenido. El arquitecto Rudolf Steiner, en la tradición Suiza utilizaba este material como fachada de su Glass House. El origen del tavillon, tal y como se utiliza de manera contemporánea, parece remontarse al siglo XIII, localizándose las primeras obras en la zona del Jura. La Escuela en Orsonnens de TeD'Arquitectes utiliza una solución muy similar en su fachada.

Imagen de una vivienda en los Jura por Christine et Fabio

Vivienda en Taveyanne cerca de Villars-sur-Ollon, Suiza

El tavillon implica una técnica constructiva concreta en función la posición en la que se coloca y también según la tradición de la región. Por una parte existe el tavillon colocado a tope con solape vertical y el colocado doble solapamiento lateral y vertical, siendo este último más adecuado para techos curvos. La tejuela, utilizada también en los países nórdicos, utiliza una disposición muy similar como en la Iglesia de Kärsämäki.

Uso de la tejuela en Polonia. Iglesia en Rownia, cerca de Ustrzyki Dolne via wikimedia commons

Las dimensiones habituales de estas piezas de revestimiento determinan también su arraigo local. El tavillon tiene unas dimensiones de 10-14 cm de ancho y 40-45 cm de ancho con un espesor de 15 a 20 mm y es típico de Francia y Alpes. El tavillon, sin embargo, oscila entre los 10-15 cm de ancho y 42 cm de largo en techos y 33 cm de largo para fachadas, siempre con un espesor de 3 a 5 mm. El tavillon es habitual en Suiza.

Desbastado de los bloques de madera para la obtención de las tablas. Imagen via wikimedia commons

Corte de las piezas en una carpintería tradicional. Imagen via wikimedia commons

Saturación de la madera en agua para prevenir futuros hinchamientos con las consecuentes tensiones internas del material. Imagen por Alexis François

La colocación de estas piezas se realiza mediante claveteado o sin perforación previa, en cuyo caso se lastran con piedra, o se evita su movimiento mediante troncos. Su disposición se realiza sobre un soporte previo: fachada o cubierta, utilizando unas 100 unidades por metro cuadrado o 250 si se realiza doble solapamiento. Los techos de madera son hasta diez veces más aislantes que los de teja, veinte más que la pizarra y treinta y cinco más que la piedra. Por ello el tavillon es una solución tradicional muy efectiva que se sigue utilizando hoy en día.

Colocación y reposición de tavillon en una cubierta, Se utilizan troncos de madera para asegurar tramos de colocación, evitando el resbalamiento de las piezas Imagen por Alexis François

Las maderas utilizadas dependen de la región, siendo el abeto y el alerce más común en regiones montañosas y roble o castaño en las llanuras. En otras zonas de carácter tropical (ex-colonias francesas) se utilizan tamarindo o árbol del hierro. En Noruega también se utiliza esta técnica, pero con piezas más gruesas (dado el clima más extremo) de madera roja Furu fijada con tacos de madera. Y en países como Polonia, Austria o Alemania se utilizan igualmente especies similares a las francesas.

Detalle de un remate en esquina. Imagen por Alexis François

Imagen por Alexis François

La vida útil de estos revestimientos depende de la orientación de los techos. La máxima durabilidad está garantizada en orientaciones norte o sur, donde las oscilaciones térmicas y de humedad son menores que en orientaciones este-oeste. También influye su método de colocación y el cuidado con el que éste se ponga en práctica.

La patología más agresiva de este tipo de revestimiento es la variación de humedad y la presencia de hongos xilófagos. Las variaciones de humedad provocan fendas por efecto de las tensiones internas del material derivadas del hinchamiento. Los hongos xilófagos necesitan de unas condiciones térmicas y de humedad, pero también de la falta de mantenimiento, patología que puede atajarse tras una simple inspección visual. Si no se ven afectados por ninguna patología su durabilidad es muy elevada, 80-100 años en roble o castaño, 40 para el pino y 25 para el abeto.

Colocación del tavillon en fachadas. Imagen por gigile

La obtención del tavillon es cuidadosa, ya que se trata de madera aserrada. Las condiciones de extracción de la pieza del bloque de madera influye en su durabilidad ya que si se interrumpe la la fibra de la madera el agua puede penetrar en profundidad con facilidad. Para ello se utilizan herramientas específicas que permiten su corte limpio. En la actualidad la colocación del tavillon o tavaillon está regulada, y sólo la realizan tavaillonneurs mediante criterios regularizados.