Descarga el PDF con más información. Proponemos un modo de estar en el bosque: un entorno activo y en constante transformación que, al igual que nuestras ciudades, cuenta con protocolos de convivencia de gran complejidad. Nos incorporaremos de manera decidida y consciente. Buscaremos nuestra posición, asumiendo nuestra presencia de diversas maneras, con variaciones y constantes entre cada una de las construcciones. Habrá quien las encuentre demasiado parecidas y quien reconozca diferencias entre ellas, tal como sucede con los ejemplares de las especies que las rodean. Edificaremos un sistema con capacidad de adaptación, abierto acada uno de los estímulos que el entorno ofrece. Sumaremos una nueva especie que nos permitirá amplificar la percepción de todo lo que ya está allí.