Paso peatonal elevado. Mxtstudio

La salida para el norte de Lisboa está asociada naturalmente al trazado del rio Tajo.
En la estrecha franja de territorio plano y seco que se encuentra entre el Tajo y las zonas inundables por un lado, y los montes del ayuntamiento de Vila-Franca de Xira por otro, ecos de la no muy distante Sierra de Montejunto, fueron progresivamente implantadas infraestructuras de diversas naturalezas.
En el Forte da Casa, esta franja, con aprox. 1500m de largo, contiene, en lo que corresponde a transportes, la autopista A1, la carretera nacional N10 y sus variantes y la línea ferroviaria del Norte, aquí cuádruple y cruzando sobre si misma en un largo fly-over, todas con sus respectivas servidumbres de dominio público, franjas de protección, reglas de ocupación, etc. etc.
Crece, también en esta franja, el acueducto de Alviela, menos famoso que el de Águas-Livres, pero parte integrante y relevante del abastecimiento de agua de la ciudad de Lisboa, y, asociada a la N10, la existencia de un conjunto de industrias pesadas como Adubos de Portugal o Solvay, y las Oficinas Generales de Material Aeronáutico, con su aeródromo
Todas estas ocupaciones, lineales y paralelas, como las rectas de la naturaleza misma, tienden a encontrarse en el infinito, aquellos pocos puntos de interconexión, en las estaciones ferroviarias junto con las aglomeraciones de asentamiento histórico más antiguo, en los entroncamientos de las carreteras que vienen del oeste para el rio siguiendo valles, …
En esta forzada ciudad lineal, al contrario de la otra, la “Ciudad Lineal” planeada por Arturo Soria y Mata para Madrid, la articulación entre espacios e infraestructuras urbanas es tenue.
La ciudad, aquella anónima, se anida en los espacios posibles, fragmentada y discontinua tanto espacialmente como temporalmente, ansiando la fluidez y la continuidad da ciudad que todos los días recorremos sin que sea necesario nombrarla y tener consciencia de ella, ansiando ser la “Ciudad Lineal”.
En un esfuerzo de articulación entre los espacios urbanos, el Municipio de Vila Franca de Xira tiene, actualmente, en desarrollo la recualificación del frente de la margen derecha del rio Tajo a lo largo de casi de 7,5 km, el futuro Parque Lineal do Estuário del Tajo, con posibilidad de unión con el Parque del Tajo y Trancão, ya en Lisboa.
Asociado a esa operación, un conjunto de infraestructuras, en la perpendicular de ese frente del rio, se promueve la interconexión de ese frente con los núcleos urbanos más próximos.
Comparativamente con los 7,5 km son relativamente pocos los metros de extensión de esas infraestructuras, pero, cuando se entiende el territorio en donde se insertan, se ve que tienen un enorme impacto en la consecución de la continuidad del tejido urbano.
Este pasaje elevado, con sus poco más de 220m, une simultáneamente el núcleo urbano de Forte da Casa, el oeste de la N10, con los espacios comerciales y de almacenes al este de la misma, y, además para el naciente, con el territorio del Parque Lineal del Estuario del Tajo, después de atravesar la Línea del Norte.
Desde el inicio decidimos que esta dimensión de búsqueda de la continuidad urbana, seria el objetivo principal a conseguir.
Al contrario de la localización/solución propuesta en las bases del concurso, que proponía dos puentes separadas, una sobre la N10 y la otra sobre la Línea del Norte, propusimos desarrollar una solución con un puente que uniese los tres puntos pretendidos.
Se Procuró una mejor integración con el núcleo urbano de Forte da Casa, utilizando como espacio de interconexión el pequeño parque público, al lado de la N10, zona no construida al ser atravesada, entre otros, por el acueducto del Alviela e por un conducto de salmuera que alimenta una de las unidades fabriles da Solvay, de localización próxima.
El punto intermedio de unión con los espacios comerciales al este de la N10, al aproximarse, encuentra una posición más adecuada, no dependiendo del reducido paseo existente, encorsetado entre la N10 y la vía desnivelada de servicio a los edificios al este de esta.
En el oeste del pasaje elevado, la conexión del centro urbano del Forte da Casa con el margen del río está fuertemente condicionado por la presencia de la Línea del Norte, a semejanza de prácticamente todo el municipio, pero aquí agravado por la presencia del paso elevado ferroviario que obliga a que cualquier cruce de la vía ferroviaria tenga que hacerse con alturas anormalmente elevadas, un poco más que el doble de altura mínima de los pasos peatonales y para ciclistas en situaciones normales.

Entre:
La altura mínima de cruce de la N10 y la línea del Norte. La distancia de seguridad a postes y elementos en tensión de la catenaria de alimentación eléctrica dos convoyes. La localización de infraestructuras enterradas. La adecuación estructural de la dimensión del vano en todos los cruces. Limites de costes de obra. Y, no menos importante, la voluntad de claridad en un contexto urbano desconectado.
La solución procuró construir apenas una línea en el aire, atravesando el estrecho canal que resultó de la superposición de todas las restricciones identificadas.
Una línea en el aire, que a partir de su casi horizontalidad, refleja y contrasta con la topografía, la complejidad y densidad infraestructural y ate, paradójicamente con su conexión, con la desconexión entre tejidos urbanos.
Una línea en el aire, que por estar en el aire, se convierte en un mirador sobre el paisaje del lugar a donde se quiere llegar.

SOLUCIONES TÉCNICAS Y ACABADOS
La relativamente elevada altura a la que el puente pasará sobre la vía férrea aconseja la utilización de protecciones opacos y de altura considerable para atenuar, las sensaciones de vértigo, y la exposición al viento.
Una sección resistente en U, con 3.5m de largo exterior, en hormigón armado prefabricado a lo largo de prácticamente toda su extensión, con la introducción de estructuras resistentes en acero solo en el tramo sobre la vía férrea en donde el vano es sustancialmente mayor que en el restante desarrollo del puente.
Se trata de una tipología de ponte ya testada, con eficacia comprobada, que integra vigas y protecciones en un solo elemento, optimizando el uso do material. Este elemento híbrido viga/protección integra además un conjunto de instalaciones técnicas de las cuales se destaca la iluminación, que deberá recurrir a luminarias salientes, alojadas en un tubo continuo en acero.

Genéricamente los acabados son:

Pintura para el exterior de color verde de todo el tablero principal y viga de la rampa de acceso al parque al oeste;
Hormigón visto en todos los elementos verticales de soporte, incluyendo escaleras y cajas del ascensor incluyendo tratamiento anti-grafitti.
Pavimentos en mortero con ceniza, hidrofugante y endurecedor de superficie.
Caras interiores del tablero en hormigón visto en las zonas de construcción en hormigón y revestido con placas prefabricadas de hormigón, también con su cara dejada a la vista.

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