DESCARGAR AQUI PDF CON MAS INFORMACIONA la hora de plantear una propuesta a las necesidades de la Universidad de Alcalá nos encontramos con un proyecto incómodo. Por un lado el proyecto surgió de la necesidad de agrupar los laboratorios de manipulación y almacenes de peligrosos productos químicos fuera de las facultades del Campus de la Universidad de Alcalá; por otro lado, el edificio no podía perder su ubicación central respecto a esas áreas de docencia. O dicho con otras palabras, ¿cómo calibrar las decisiones arquitectónicas de un edificio que, por su peligrosidad, las facultades se peleaban entre si por alejarlo lo más posible, sin poder perder por otro lado, en virtud de su buen funcionamiento, su condición de proximidad a dichos usuarios?

Por esa razón, además de las necesidades del programa, su uso y el contexto donde se ubica, este edificio nació forzado a esconder su interior luchando contra el carácter de sus fachadas. Frente a la condición dispersa del entorno, el edificio responde con el carácter COMPACTO de un volumen sin fisuras, sin ventanas, que esconde lo que no se quiere ver. Un volumen hermético abierto al cielo que resuelve por medio de profundos patios la luz que la fachada le ha negado. Patios que separan por su peligrosidad los cuatro grupos de laboratorios y almacenes, así como las salas de control y servicios, ventilando en lo posible sus espacios comunes; patios profundos que evitan el cielo para recoger su luz, ralentizándola, para distribuirla en el interior del edificio de una manera uniforme.


Frente al carácter uniforme, inerte y equivocado de los acabados en ladrillo de los edificios que rodean el proyecto, la propuesta responde a través del carácter LATENTE de sus paramentos. Grandes palastros de acero galvanizado de dimensiones de fabricación máximas y 5 milímetros de espesor que reverberan, frente a la pasividad de sus vecinos, con los matices de la luz exterior y los colores del cielo.



Frente a la ambigüedad de escalas de los edificios del contexto, la propuesta plantea la manipulación del proyecto, de sus puertas, en términos de ESCALA. A través de éstas no solo se entra y se sale del edificio, sino también, se abre y se cierra espacialmente todo el proyecto. O dicho de otra manera: el cajón de puertas cerradas abierto por medio de patios a la luz exterior, a su dimensión vertical, frente a las bocanadas de dimensión horizontal, al recoger en su interior el horizonte en el preciso instante de la apertura de una de sus puertas.
Texto: Héctor Fernández Elorza
Maquetación: BLC
DESCARGAR AQUI PDF CON MAS INFORMACIONObra: Edificio de laboratorios y
almacenes químicos de la Universidad de Alcalá de Henares
Arquitecto: Héctor Fernández-Elorza
Colaboradores: Raúl García Cuevas, Carlos García Fernández
Año: 2004-2009
Emplazamiento: Campus de Alcalá de Henares, Madrid
Fotografías: Carlos Pesqueira
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