El Premio Mapei a la Arquitectura Sostenible, organizado en colaboración con el Green Buiding Council España (GBCe), destaca aquellas obras que aúnan calidad arquitectónica con el respeto con el medioambiente, y en esta edición este planteamiento se ha visto reforzado con la entrega de un premio especial al edificio saludable.
El jurado de esta séptima edición ha estado compuesto por Sonia Hernández-Montaño Bou, arquitecta Máster en bioconstrucción por el IEB-UdL y fundadora del estudio Arquitectura Sana; Patrizia Di Monteim, arquitecta por el I.U.A.V. de Venezia, Máster por la ETSAB, funda con Ignacio Grávalos gravalosdimonte arquitectos en Zaragoza; Manuel Sánchez-Villanueva Beuterer , arquitecto por la ETSAV, es socio fundador del despacho HAZ Arquitectura; María Langarita, es doctora arquitecta por la Universidad Politécnica de Madrid y socia fundadora junto a Víctor Navarro de la oficina de arquitectura Langarita Navarro; y, como Comité Técnico: Bruno Sauerre, arquitecto, director general de GBCe; Dolores Huerta, arquitecta y directora general del GBCe; Mar Penin, arquitecto y jefa de la oficina técnica de Mapei Spain, S.A.U y Paula Rivas, arquitecta y directora técnica del GBCe, como Secretaría del Jurado.
Fotografía: Pol Viladoms.
Valoración del jurado: Se trata de un proyecto austero y sincero que hace un uso honesto de los materiales que se muestran con sencillez.
Fotografía: Pol Viladoms.
La solución propuesta logra los objetivos basándose en la rotundidad geométrica y material e implementando las estrategias necesarias, sin buscar la superposición de soluciones.
Fotografía: Pol Viladoms.
Se valora la implantación que se hace en el entorno y cómo las viviendas se relacionan tanto con el exterior como con los espacios interiores que generan también espacios de comunicación y encuentro entre los vecinos.
El primer Premio Mapei recibe 6.000 euros y una beca GBCe.
Fotografía: Adrià Goula.
Valoración del jurado: Se desarrolla el concepto caja dentro de la caja en una intervención rehabilitadora mínima y muy eficaz en la envolvente. Se aumenta la inercia térmica y mejora la iluminación y la ventilación naturales logrando una gran calidad de la envolvente sin modificar la imagen original del edificio.
Fotografía: Adrià Goula.
El uso de patios y zonas semiabiertas que introducen el jardín en el edificio genera una diversidad espacial que eliminan la jerarquía clásica de las oficinas y permite lugares para reuniones, el trabajo individual o espacios compartidos que multiplican las posibilidades del uso. Además, se ofrece una gran adaptabilidad capaz de albergar usos dispares y variados según la demanda y las necesidades futuras.
Fotografía: Adrià Goula.
También se valora la revitalización de una zona degradada de la ciudad en la que se crea un objeto arquitectónico de gran calidad y es tractor de usos dinamizadores.
Fotografía: Adrià Goula.
El Segundo Premio Mapei recibe 3.000 euros y una beca GBCe.
Fotografía: José Hevia.
Valoración del jurado: Se valora esta propuesta como soporte de vida capaz de adaptarse a diferentes condiciones. Se trata de unas viviendas sociales revolucionarias y replicables que dan respuesta a las necesidades físicas y psicológicas que demanda una vivienda.
Fotografía: José Hevia.
Las estrategias de sostenibilidad dan respuesta de alta calidad dignificando una solución habitacional para personas vulnerables.
Fotografía: José Hevia.
El Tercer Premio Mapei recibe 1.500 euros y una beca GBCe.
Fotografías: José Hevia.
Valoración del jurado: Llama la atención la aproximación tan asimétrica a la problemática de la salud en los edificios, en la que no es fácil encontrar una propuesta holística de los diversos factores que intervienen.
Fotografía: José Hevia.
Este edificio destaca notablemente por la respuesta que ofrece a los cuatro componentes de la salud, la componente química, física, biológica y psicosocial. El uso de materiales naturales favorece la calidad del aire interior, evitando emisiones de elementos químicos contaminantes y ayudando también al equilibrio higrotérmico ambiental.
Fotografía: José Hevia.
Factores como la iluminación, confort acústico, la protección frente a campos electromagnéticos apoyan la concepción integral de los componentes de la salud. Desde el punto de vista psicosocial , se proponen espacios no jerarquizados y con una gran riqueza en las zonas comunes de encuentro entre personas.
El Premio Especial al Edificio Saludable recibe 1.000 euros y una beca GBCe.
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Publicado: Dec 1, 2023