Endless Stair, una imponente estructura, a modo de figura imposible de Escher, formada por 15 escaleras entrecruzadas fabricadas con madera contralaminada de tulipwood estadounidense, ha sido diseñada por de Rijke Marsh Morgan Architects (dRMM) con ingeniería de Arup.
Endless Stair es, al mismo tiempo, una escultura y un proyecto de investigación.
Endless Stair está formada por una serie de tramos de escaleras de madera, algunos de ellos girando a la izquierda y otros a la derecha. Esta disposición ofrece muchas maneras de explorar la instalación.
Desde el comienzo del proyecto se adoptó la decisión de diseñar y construir los escalones y las barandillas de uno de los lados a partir de elementos de madera contralaminada idénticos, de tamaño equivalente, apilándolos unos sobre otros con un elemento separador entre ellos. De esta manera se crean los tramos de escalera que, debido al proceso de apilamiento, giran a la derecha o a la izquierda, dependiendo de la posición de la barandilla.
El diseño del proyecto pone de manifiesto la importancia estructural de la madera contralaminada de tulipwood. La madera contralaminada de los paneles que forman las huellas y las barandillas está fabricada con tres capas idénticas y tiene un grosor total de 60 mm. El uso de otras especies hubiera incrementado indudablemente el grosor de los elementos individuales y probablemente no hubiera permitido una solución tan elegante. La madera contralaminada de tulipwood ofrece la posibilidad de combinar las ventajas de la madera contralaminada con la resistencia y la apariencia del tulipwood.
La madera contralaminada es un producto transformado de madera cuyo uso es cada vez más habitual en la construcción para suelos y paredes de edificios. La madera contralaminada tiene una estructura tipo “sándwich”, normalmente con un número impar de capas. En cada capa sucesiva, las fibras de la madera se sitúan en direcciones perpendiculares, de manera que si pudiéramos ver a través de las caras de la madera contralaminada observaríamos una cuadrícula de fibras. Como se sabe, la madera es anisótropa, lo que significa que tiene propiedades diferentes en tres direcciones. Esto es importante porque la madera es resistente en la dirección de la fibra, pero lo es menos perpendicularmente a la fibra. El resultado de la construcción de esta estructura es un panel que tiene la misma resistencia, en sus caras, en todas las direcciones. Esta disposición también le confiere estabilidad dimensional. Los métodos de fabricación modernos permiten fabricar los paneles de madera contralaminada en una fábrica y entregarlos posteriormente en el emplazamiento final para un montaje rápido y preciso, reduciendo así el tiempo necesario para la construcción.
Igual que todas las especies de frondosas estadounidenses, el tulipwood, una de las más abundantes en los bosques estadounidenses, crece de manera sostenible. Su nombre botánico es
Liriodendron tulipifera que, igual que el nombre común, se deriva de la forma de tulipán característica de sus flores
. Su resistencia estructural es bien conocida, ya que es una de las especies con las que Arup y el Building Research Establishment (BRE) efectuaron diversos ensayos hace varios años. Se trata de un material inusual en el sentido de que a pesar de tener la misma resistencia a la flexión que el roble, su densidad es similar a la de una conífera típica.
A pesar de la compleja forma escultórica, el concepto estructural de la escalera es relativamente simple. Los tramos de escaleras tienden a actuar como elementos de arco, transfiriéndose las cargas al suelo a través de los elementos rígidos de la barandilla y de las mismas huellas. El conjunto de la estructura es estable cuando se unen todos los tramos para formar la forma escultórica global.
Las barandillas parecen vigas de madera maciza, pero en realidad están formadas por una serie de paneles de madera contralaminada unidos con adhesivo. Los esfuerzos de tracción y de compresión de la viga tienen que transferirse de panel a panel en cortante de rodadura. La resistencia al cortante de rodadura determina por lo tanto la resistencia a la flexión de la viga. Si las barandillas se hubieran fabricado con madera de coníferas en lugar de madera contralaminada de frondosas, hubieran tenido menos de la mitad de resistencia. La escalera hubiera sido mucho más flexible y podría haber sido necesario aplicar un solapamiento mucho mayor entre los paneles.
Arup tuvo que identificar los criterios de diseño de ingeniería apropiados para evaluar el comportamiento de
Endless Stair. Helen Groat, Ingeniera Estructural Principal de Arup, dirigió el equipo que realizó un gran número de modelos informáticos para diseñar la intrincada estructura. Nüssli fabricó un tramo de prueba con el fin de comparar su comportamiento con el del modelo por ordenador. También debido a la complejidad del diseño, el comportamiento general ante las vibraciones no podía predecirse fácilmente mediante análisis. La escalera acabada se sometió a ensayos in situ antes de su apertura formal al público con el fin de medir su comportamiento.
Imola Legno, una destacada empresa dedicada a la distribución de madera situada en el norte de Italia, fabricó la madera contralaminada de tulipwood a partir de madera aserrada de tulipwood de anchos y largos corridos, donada por 8 empresas asociadas de AHEC. El equipo fabricó las tres capas de madera de 20 mm para crear paneles de 60 mm de grosor. Los paneles utilizaron algunas de las peores calidades de tulipwood, lo que definió su aspecto visual y permitió también un ahorro de costes significativo.
La empresa suiza Nüssli fabricó los tramos de escaleras y otros elementos, utilizando una combinación de fijaciones mediante adhesivo y elementos de acero. Nüssli entregó estos elementos en el emplazamiento de la instalación frente a Tate Modern, donde se montó la estructura en 10 días.
Fotografías ©
Jonas Lencer, Judith Stichtenoth, Thomas Etchells, Raphael Villiermet, Alex de Rijke