Crick. Pedro Feduchi

bookmark_border GUARDAR

“Han de recordar constantemente que lo que ven no fue diseñado, sino que evolucionó”
Francis Crick, What Mad Pursuit [NY, Basic Books, 1988] p138
¿Qué falta hace diseñar un taburete más? ¿Es que no hay ya suficientes? Responder a estas preguntas entraña una toma de posición como diseñador. En el fondo, de lo que se trata, es de saber responder a una cuestión más básica. ¿Qué nos impulsa a diseñar objetos? ¿Qué lo justifica? Parece como si siempre tuviéramos un porqué para justificar una nueva idea, algo que nos alienta a pensar en una opción diferente, nueva, a explorar lo que nos gusta. La justificación funcionalista fue una constante durante los últimos cien años pero ya no nos satisface tanto.
Un buen arranque es resolver adecuadamente sus aspectos esenciales. Por ejemplo, en un taburete, lo primero sería asegurar que es útil para sentarse. Luego, cuando no esté usándose, que no ocupe mucho espacio. Por supuesto, que sea fácil de fabricar y que sea duradero.
Una vez resuelto lo básico aparecen las mejoras. Por ejemplo, asegurar que sea fácil de transportar de un lado a otro. Que al ser depositado no vuelque al primer topetazo. Quizá para no convertirse en un estorbo debería ser apilable… Si a resultas de estas premisas se consigue un buena forma el resultado será adecuado. Pero lo difícil no es solventar funciones, lo difícil es lograr la forma idónea, aquella que nada más verla nos deja huella. Eso es quizá lo más difícil y lo que nos mueve a diseñar.
-El taburete Crick tiene dimensiones adecuadas para sentarse.
-Es de madera, la materia por excelencia: consistente y ligera, se talla con facilidad y es duradera.
-Es de fabricación sencilla y el ensamblaje de sus piezas elemental.
-Su centro de gravedad es bajo debido al ensanchamiento inferior de sus patas. Por tanto, no vuelca fácilmente.
-Su asiento no tiene una forma caprichosa, resulta del giro de las patas según la hélice ascendente de apilado.
-Los tres agujeros de su tapa permiten alzarlo con facilidad.
-Sus tres patas se apoyan bien sobre cualquier plano.
-Las superficies esféricas aseguran el apoyo en un punto de contacto tanto al apilarse como al asentarse en el suelo.
Lo difícil, repito, no es solventar funciones, lo difícil es que además su forma nos atrape.
Crick!
A pesar de aparentar ser un diseño caprichoso todo surge de lo funcional. Sin embargo, no es suficiente la buena solución que mejore el uso, hay que llegar, además, a que tenga una forma equilibrada.
Había que resolver de forma precisa la distancia de separación entre los taburetes al apilarlos. Un bodoque que recuerda a un espolón resultó ser lo más sencillo. La pata tiene un aro de goma para evitar los golpes.
Lo único que se le debe exigir a un asiento es que sea ligero y que sea fácil de mover. Los tres agujeros permiten que el taburete pueda ser apilado y desapilado. Además, sirve para poderse desplazar.
¿Por qué Crick? Elemental querido Watson…
En el año 2004 falleció Francis Crick, hace ahora diez años.
El taburete rinde homenaje a este gran investigador que descifró la ley geométrica y el orden interno que regía en la molécula del ADN. Como toda pista visual para llegar a esta brillante conclusión, James D. Watson y Francis Crick, partieron de una fotografía, la famosa “Photo 51” realizada poco antes por Rosalind Franklin. De un orden visual implícito consiguieron dar con el orden estructural funcional, el proceso inverso con el que desarrollamos un diseño.
Para la presentación del taburete en Mondo Galería (22-11-14) se ha realizado una serie de diez taburetes numerados y con la firma de Crick grabada en una de sus patas.
\CentralDatosDibujos13-003 taburete Crick3 expoDIBUJOSdi

 

PedroFeduchi_Crick_d3

 

PedroFeduchi_Crick_f1PedroFeduchi_Crick_f2PedroFeduchi_Crick_f3PedroFeduchi_Crick_f4PedroFeduchi_Crick_f6

 

PedroFeduchi_Crick_f8

 

PedroFeduchi_Crick_f10


Editado por:

CQ. Tectónica

Publicado: May 31, 2015

¿Quieres que Tectónica sea tu MediaPartner? Descubre cómo aquí